Secretos de Córdoba: lugares que seguramente no conoces
LA CUEVA DE LOS MURCIÉLAGOS (ZUHEROS)
No podemos decir que Zuheros sea precisamente un secreto, pero sí que es uno de los lugares más encantadores de Andalucía, el ejemplo perfecto de pueblo andaluz. Pero más allá de su reconocida estampa con el castillo árabe encaramado al risco y un mar de olivos que envuelve a su blanco caserío, encontramos un cerro calizo a sus espaldas que en sus extrañas sí esconde un secreto: una cueva prehistórica. La Cueva de los Murciélagos hubo un tiempo en que estuvo habitada, hoy es un conjunto arqueológico excepcional donde se conservan pinturas rupestres desde tiempos del Neolítico. También encontramos formaciones como estalactitas, estalagmitas, banderas y coladas, la más famosa la estalactita conocida como ‘El espárrago’, con unos 4 metros de alto. La cueva se visita de miércoles a domingo y es aconsejable la reserva.
PUENTES DE ESTILO PARISINO EN UNA VÍA VERDE
Pueblos blancos, castillos árabes… pero también deporte. Una escapada a Córdoba puede combinar sus muchos atractivos con una ruta en bici por la Vía Verde de la Subbética, siguiendo el trazado del antiguo Tren del Aceite. Por el camino nos vamos a encontrar cañones, cuevas y puentes de hierro como el viaducto sobre el río Guadajoz, cerca de Luque desde donde parte esta ruta, una imponente estructura metálica construida por la misma casa francesa que elaboró los puentes de Mirabeau y Bir-Hakeim sobre el parisino río Sena. Una maravilla de la arquitectura del hierro decimonónica construida en 1891 con 199 metros de longitud y 50 de altura por la que atravesaremos al inicio de la ruta. El itinerario continúa luego, durante 65 kilómetros, por el sur de Córdoba y finaliza en Puente Genil. No es necesario realizarla entera, también se puede afrontar por tramos, muchos de ellos atraviesan lugares con tanto encanto como Luque, Zuheros, la laguna del Salobral o Cabra, la parte más bella del recorrido.
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LOS CIELOS MÁS LIMPIOS Y ESTRELLADOS DEL MUNDO
Al norte de la provincia de Córdoba, en una de las mayores dehesas del mundo como es el valle de los Pedroches, encontramos un Destino Starlight considerado uno de los diez mejores lugares del planeta para observar el firmamento infinito. No ir a descubrirlo sería casi un pecado. Los pueblos que forman el valle han tomado conciencia preservando su cielo de contaminación lumínica, como Villanueva del Duque, donde encontramos un observatorio astronómico que se puede visitar de la mano de guías profesionales. En los 17 pueblos que forman el valle se localizan miradores estelares en los que se hacen observaciones dirigidas a través de empresas de turismo activo de la zona (cietlospedroches.es).
Y como no va a ser observar estrellas, para cuidarnos está el Centro Termal Los Pedroches (centrotermalpedroches.com), con las más avanzadas técnicas del termalismo para cuidarnos y volver a casa como nuevos.
ALMEDINILLA, UNA CASCADA Y UNA VILLA ROMANA
Hay pueblos de los que nunca, o pocas veces, hemos oído hablar. De esos que no sabríamos ubicar en un mapa pero que cuando los descubres quedas sorprendido, boquiabierto, de sus encantos y tentaciones. Eso pasa con Almedinilla, donde en una ruta senderista podemos ver cómo el río Caicena se desploma en una bella cascada conocida como El Salto del Caballo. El agua cae en una suave cortina y luego se estampa contra una terraza llana. Al lado, una cueva a la que solo se entra en verano, cuando el agua aminora su ímpetu.
Pero no es la única sorpresa en esta localidad. La villa romana del Ruedo es la otra. Está a las afueras de Almedinilla y corresponde a un asentamiento rural, fechado entre los siglos I y VII, que ha conservado las habitaciones privadas con mosaicos y pinturas de gran valor. Junto a las habitaciones otros espacios como salones, cocinas, molinos de aceite, silos, hornos y lagares (almedinillaturismo.es).
EL BARRANCO DEL RÍO BAILÓN
Entre las localidades de Cabra y Zuheros, podemos pasear por el cañón del río Bailón, un formidable tajo abierto por la erosión fluvial en la roca caliza que invita a recorrer una de las rutas más bonitas del Parque Natural de las Sierras Subbéticas. En el área recreativa Las Cruces nace un sendero circular de 4,7 kilómetros y dos horas de duración que permite contemplar el cañón a vista de pájaro desde el mirador de la Atalaya y luego recorrerlo por su fondo. El río Bailón nos acompañará en el camino, desde su nacimiento hasta su llegada a la depresión del Guadalquivir. Durante el trayecto atravesamos parajes de gran belleza, como las bonitas cascadas de Las Chorreras.
CISTERNAS ROMANAS DE MONTURQUE
Blanca y arracimada en torno a un cerro, como otras poblaciones cordobesas y andaluzas. Así es Monturque, pero lo que más llama la atención de esta localidad a 55 kilómetros de la capital, son las cisternas romanas que durante décadas abastecieron de agua a la ciudad. Están excavadas en la roca en la zona alta y fueron descubiertas en el siglo XIX. Hoy se pueden visitar gracias a un proceso de restauración y musealización (turismomonturque.com) y viajar en el tiempo a través de sus galerías.
ESPEJO Y SU CASTILLO DUCAL
Quizás no sea una localidad tan conocida o que nos suene tanto como Zuheros, pero Espejo debería de ser parada imprescindible en una visita por Córdoba. Su fortaleza del silgo XIII es algo así como el castillo perfecto. Encaramado sobre un cerro dominando el horizonte y los valles cercanos, controlando día y noche los caminos que llegan a la villa. Flanqueado por cuatro grandes torreones, desde su poderosa torre del homenaje se obtiene una vista única. Hoy el castillo es propiedad de la duquesa de Osuna y abre sus puertas para mostrar sus valiosas obras de arte, el patio de armas y sus salas.
UN CASTILLO ¡Y UNA PLAYA! EN ALMODÓVAR DEL RÍO
El castillo de Almodóvar del Río, a 24 kilómetros de Córdoba, sabemos que no es muy desconocido, y menos desde que se convirtiera en Altojardín en la serie Juego de Tronos. Pero lo que sí tenemos claro es que es una joya de mediados del siglo VIII sobre una colina a más de 200 metros de altura que recibe numerosos visitantes siguiendo el itinerario de los escenarios de la serie. ¿Pero cuántos de esos turistas saben que si visitas Almodóvar del Río, especialmente en verano, hay que llevar bañador? Pues sí, porque la localidad además de castillo tiene playa. El embalse de La Breña tiene tres playas donde se permite el baño, con su chiringuito y sus sombrillas, en un entorno ideal donde se pueden practicar deportes acuáticos o hacer un recorrido en un barco solar, totalmente ecológico y silencioso (turismodealmodovar.org).
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UN JARDÍN MICOLÓGICO EN PRIEGO DE CÓRDOBA
Priego de Córdoba es seguramente uno de los pueblos más bellos de la provincia. Un blanco caserío perfumado de flores que inundan fachada, plazas, casas y balcones. Un paseo por el encantador barrio de la Villa, de inspiración árabe con calles estrechas y empedradas, asomarse al balcón del Adarve, pasear por el castillo… están dentro de los clásicos en cualquier visita. ¿Pero sabíais que Priego tiene un jardín micológico que es único en Europa? Se llama el Jardín Micológico La Trufa y se ha convertido en el centro andaluz de micología. En sus salas se recrean la flora y los hongos más representativos de esta comunidad que, para quien no lo sepa, es una de las regiones europeas de mayor riqueza y diversidad fúngica. Un motivo más para revisitar Priego de Córdoba.
TRAS EL BANDOLERO MÁS FAMOSO DE ANDALUCÍA
Entre Málaga, Córdoba y Sevilla se reparten la conocida como Ruta del Tempranillo (rutadeltempranillo.es) que trata de adentrarse en la historia del bandolerismo romántico en Andalucía y de José María el Tempranillo, el más famoso de los bandoleros andaluces, criado en la localidad cordobesa de Jauja. La ruta ofrece visitas guiadas y personalizadas por municipios que en Córdoba nos lleva de Benamejí a Jauja-Lucena. En esta última se visita el Centro Temático del Bandolerismo Romántico, cuatro plantas dedicadas a contar este fenómeno del XIX en Andalucía. ¿eres un viajero romántico?